23. Un mundo para imaginar

Para mí era un coro de gospel de Alabama. Para Oskar era un grupo cristiano de Jamaica. También podían ser vecinas de un barrio de Londres, o maestras de Panamá, o empleadas de bibliotecas de Brasil, o miembros de una ONG de Sudáfrica, o...
Cada fotografía tiene que ser un mundo para imaginar.

Estaban posando en la catedral de Santiago y no pude resistir el impulso de hacer la foto. La hice desde lejos y rápidamente. El encuadre quedó grande y torcido, pero en casa he hecho mis trucos de magia.


Martes, 10 de marzo de 2015